María Celeste López!, es el ultimo día de clases -- dijo mi madre que me levanto de un ligero grito y un desayuno en la cama como siempre lo hacía. Este va a ser un gran día me dije a mi misma. Tengo todo planeado, voy a encontrarme con Gustavo, el chico que me gusta, e iba ir a la segunda fiesta de mi curso en la casa de mi compañero. Una chica como yo no querría perderse toda esa diversión, para mí, divertirme y/o beber es igual a pasarla increíble y para mí eso nunca debe faltar en mi vida, soy una chica con muchas amigas, que sale mucho, y que simplemente hace lo que quiera aunque sus padres no quieran.
Al salir del colegio me encontré con una amiga, llamada Clara con el mismo propósito que yo, solo que ella no quería ver a Gustavo, sino a Daniel, su”FUTURO”. Al llegar allá estuvimos con ellos y después de enterarnos que se habían aplazado en varias materias, que por cierto, nos provoco mucha risa; nos fuimos a caminar por ahí.
Al salir de ese lugar fuimos directo a la fiesta. Al llegar, no hace falta decir que quede ebria y comencé a decir estupideces como siempre hago, bailar y hacer payasadas. La pase muy bien aunque me arrepentí de algunas cosas que dije, como que el chico de intercambio de la casa de mi amigo era muy lindo, el problema fue que se lo dije en su cara; cosas hechas, cosas que no se pueden cambiar. La verdad la pase muy bien y mucho no me importó esa pequeña picardía.
Después de eso fui a recuperarme a la casa de mi mejor amiga Carla, una chica extremadamente extrovertida con unos problemas de salud y algo demasiado loca pero muy buena persona. juto a ella fuimos a pasear por todos lados, y al final del día mis padres fueron a recogerme, todo fue perfecto, el mejor día de todos podría decir.
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